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martes, 27 de diciembre de 2016

"Ojos que sí ven": la antología de poetas experimentales de México y España

Ojos que sí ven nació de una complicidad; casi de un azar. Equivale a decir, de un acto poético. Todo lo que se dio desde que nos conocimos Paco, Pepe, y Dante, para que abutiera en este libro. Es una historia llena de minuciosidades, y cada una de ellas era un click para el ojo malicioso de Paco Peralto, que olfatea poesía.
Poema visual de Rafael Peralto, antologado en Ojos que sí ven.
Una de las obras antologadas: Rafael Peralto. Serie de Nueva York.

En 2010, surgió de las prensas de Corona del Sur, la antología "Ojos que sí ven" de poetas experimentales mexicanos & españoles, de la mano de mi padre, Francisco Peralto, y compartiendo autoría con los profesores José Brú y Dante Medina.

Fueron 55 poetas los seleccionados, nacidos entre los años 1928 y 1984: 

Alfonso López Gradolí: Poema en Ojos que sí ven de editorial Corona del Sur
Alfonso López Gradolí: "Mirar, mirarte".
Raúl Renán (Mérida, México, 1928), Atelier Bonanova (Oviedo, España, 1942), Francisco Peralto (Málaga, España, 1942), Pablo del Barco (Burgos, España, 1943), Alfonso López Gradolí (Valencia, España, 1943), Juan de Loxa (Loja, España, 1944), Nel Amaro (Mieres, España, 1946), José Brú (Ax-les-Thermes, Francia, 1946), César Reglero (Tarragona, España, 1948), Gustavo Vega (León, España, 1948), Ramón Maruri (Santander, España, 1949), José María de Montells y Galán (Madrid, España, 1949), Ibirico (Marruecos [español], 1950), Xavier Canals (Barcelona, España, 1951), Joaquín Gómez (Montijo, España, 1951), Isabel Jover (Barcelona, España, 1951), Juan López de Ael (Quintanilla de San García, España, 1951), Antonio Montesino (Torrelavega, España, 1951), Justina Santana (San José de los Guajes, México, 1951), Josep Sou (Alcoi, España, 1951), J. M. Calleja (Mataró, España, 1952), Miguel Jiménez (Ávila, España, 1953), Javier Ramírez (Guadalajara, México, 1953), Raúl Bañuelos (Guadalajara, México, 1954), Dante Medina (Jilotlán de los Dolores, México, 1954), José Ruiz Mercado (Guadalajara, México, 1954)Julián Alonso (Palencia, España, 1955), Manuel Calvarro (Madrid, España, 1955), Raúl Ramírez (Guadalajara, México, 1955), Francisco Aliseda (Peñarroya-Pueblonuevo, España, 1957), Luis Fernando Ortega (Cd. de México, México, 1957), Ángela Serna (Salamanca, España, 1957) Baudelio Lara (Teocaltiche, México, 1959)Nieves Salvador (Alcalá de Chivert, España, 1959), Alberto Meillón (Colima, México, 1961), Arturo Ipiéns (San Luis Potosí, México, 1962), Óscar Tagle (Yanga, México, 1964) y Edna Cantoral (Cd. de México, México, 1976), Antonio Orihuela (Moguer, España, 1965), Yolanda Ramírez Michel (Morelia, México, 1965), Mauricio Ramírez (Guadalajara, México, 1966), Carmen Peralto (Málaga, España, 1967), Agustín Calvo Galán (Barcelona, España, 1968), Jorge Octavio Ocaranza (Guadalajara, México, 1969), Rafael Peralto (Málaga, España, 1969), Elizabeth Salgado (Morelia, México, 1970), Luis Armenta (Cd. de México, México, 1971), Margarita Valdivia Ávila (Guadalajara, México, 1972), Roberto Farona (Zafra, España, 1973), Fernando Toriz (Guadalajara, México, 1973), Augusto Valdés (Cd. de México, México, 1974), Eddie (J. Bermúdez) (Barcelona, España, 1975), José Landa (Campeche, México, 1976), Laura Calvarro (Huelva, España, 1982) y Víctor Villarreal Velasco (Guadalajara, México, 1984).

En su prólogo, se relata la génesis de la idea... el germen de la creación de esta antología, que era y es un auténtico tesoro:
Poema visual de Dante Medina en Ojos que sí ven
Dante Medina: Soneto mortalmente pesimista.

OJOS QUE SÍ VEN, ¡CÓMO VEN!

Ojos que no ven, corazón de no siente.
(Refrán popular)

Ojos que sí ven nació de una complicidad; casi de un azar. Equivale a decir, de un acto poético. Todo lo que se dio desde que nos conocimos Paco, Pepe, y Dante, para que abutiera en este libro. Es una historia llena de minuciosidades, y cada una de ellas era un click para el ojo malicioso de Paco Peralto, que olfatea poesía.
Hace un par de años, nos instalamos en Sevilla, Pepe y Dante, con la intención de realizar una antología de poesía andaluza contemporánea, que luego vio la luz con el nombre de Poesía viva de Andalucía. Habíamos contactado a muchos poetas por diversas vías: amistades cruzadas, referencias, lecturas. Entre ellos, al poeta malagueño Rafael Alcalá. A nuestra residencia de Sevilla llegó la obra de Alcalá, con una carta elegante y aristocrática de Paloma, su mujer, en la que, llena de prudencia, nos hablaba de un poeta, algo huraño, escamado con todos los círculos del poder, y estupendo, ¿era posible atreverse a presentarnos su obra? Unos días después, el correo nos trajo una joya de más de mil páginas, Ritual, de Francisco Peralto. Fue el primer eslabón de una cadena que fuimos uniendo, los tres, Pepe, Paco, y Dante.
Poema visual de Raúl Renán, en la antología de poesía experimental Ojos que sí ven
Raúl Renán: sin título.
El año pasado, volvimos a Andalucía, para presentar el libro de poemas ya publicado. Les informamos a los poetas de Sevilla, Granada, Córdoba, Málaga, Almería, Cádiz, Huelva, Jaén, de los días, las ciudades, los lugares de las presentaciones, pidiéndoles participar leyendo obra suya incluida en la antología. Paco Peralto contestó diciendo que él en Málaga ni leería ni iría, pero que se desplazaría a Sevilla, para conocernos. Fue el segundo eslabón de la cadena. Nos citamos en un bar de la calle Mateos Gago, mirando para La Giralda. Tomamos un vinillo tan estupendo, que no tuvimos más remedio que hacernos amigos, en honor a que simpatizamos de inmediato.
Buscando el tercer eslabón de la cadena que aún ignorábamos, nos fuimos como tres alegres compadres a la presentación del libro a La Carbonería, con otro buen Paco, Paco Lira. Fue memorable y entrañable la noche. El encuentro con estupendos amigos: Chus Cantero, Antonio Orihuela, Uberto Stabile, Daniel Pielfort... Leyeron grandes poetas. Peralto estaba tan luminoso, tan poeta, que de la despedida, Pepe y Dante todavía tenemos guardado el abrazo que recibimos aquella noche. 
Habría que irse comprando un alhajero, nos dijimos los tres, para tanto metal precioso, y ponerle llave. Una llave que Paco Peralto ya estaba forjando en Málaga, donde nos aguardaba para invitarnos a desayunar chocolate con churros, con la inconfesada diablura de amarrarnos a su corazón por un camino que él le enseñó a Mefistófeles para que sedujera a Fausto: la tentación. ¿Cómo un par de escritores, Pepe y Dante, no iban a babear como perritos mansos, sy Paco —hasta esta "y" equivocada se nos fue por recordar ese día— nos llevó a ver su imprenta, su editorial Corona del Sur (donde «todo se hace, menos el papel y la tinta»), sus encuadernaciones, los ojos de su hija Carmen, la cordialidad de su hijo Rafael, la sonrisa de su esposa Margarita, su casa física y del alma entera? Y luego, un ejemplar en el cofre de sus tesoros bibliográficos, de Poesía viva de Andalucía, encuadernado por él, un artífice reconocido nacionalmente como labor master del arte de hacer libros de esos que gritan: «mírenme y sí me toquen», encariñados.
Poema visual de Francisco Peralto en la antología Ojos que sí ven
Francisco Peralto: Al sur de todo.

Al regreso de esas delicias (once de octubre de 2007, Málaga), en el coche, Paco Peralto dijo: «¿Y por qué no hacemos, juntos, un libro de poesía visual española y mexicana?» ¿A qué venía esa ocurrencia, de qué taller de orfebrería salió ese eslabón de la cadena encadenándo-nos, encadenándo-se? ¡Sí, claro, se podía ver para los que sí ven, era cuestión de ver! En el 2006, Paco nos preguntó si en Poesía viva cabería la poesía visual. Claro que cupería, ¿cómo no iba a cuper? Entonces nos recomendó obra de su hija Carmen, obra que no necesitaba recomendación y pasó por la puerta grande del libro abierto. Y como el 2006 fue un año tan generoso, Paco nos preguntó a Pepe y a Dante si teníamos poemas visuales para su volumen FVP. Octubre libre. Primera antología de poemas mail art. Contestamos, parados de pestañas de gusto, que sí. 
Y entonces apareció un eslabón hermoso, eslabón del que la gente se ríe porque sólo le ve el lado cómplice, y no el perfil camaradería: entre viajeros cruzándose en el camino, entre cosechadores de aceitunas, entre peregrinos a la Biblioteca; ese «si me lees, te leo», fue mágicamente transformado —¡y cínicamente, también: poeta sin cinismo es versificador!— en «si me antologas, te antologo». Así que «ton's qué?», dijo Paco, «hacemos el libro», y no era una pregunta sino una respuesta-orden. Y para que no nos bajara de su coche y nos llevara hasta el hotel sanos y salvos, Pepe dijo, rápidamente, «sí» en defensa propia, y Dante dijo, secundando, «Ojos que sí ven». «¿Qué?», dijo Paco. Que sí, que vale, que órale con el libro, y que el título sería «Ojos que sí ven».
«¡Ah!», dijo Paco, por aprobación del título, que no entendía cabalmente pero que le gustaba. «¡Ah», dijo Pepe, que sí entendía el título cabalmente y por eso le encantaba. «En México hay un dicho», dijo Dante, que dice: «Ojos que no ven, corazón que no siente». La poesía visual sí ve, por eso siente. ¡Voilà el broche de la cadena!
Atelier Bonanova, poema visual, Ojos que sí ven
Atelier Bonanova: Sin título.
El regalo, lector, para ti y para nosotros, fue que los poetas aceptaran generosamente jugar con nosotros el juego. Que nos permitieran sus poemas para completar esta baraja que ahora tocan nuestras manos —mejor dicho: sostienen. Creemos a esta aventura digna de las veleidades de un casino (el azar, otra vez, y esa palabrita, brujilla y brujulilla de las existencias: casualidad): que un ingeniero y artista se deje llevar por lo inestable (Pepe Brú), que un tipógrafo y poeta soporte las barbaridades lingüísticas de este prólogo (Paco Peralto), que un escriturador y mitómano recurra al refugio antiaéreo diciendo las palabras Cortázar y Vallejo (Dante Medina); tres poetas disímbolos trabajando juntos, en armonía de orquesta, aceptando invenciones, caprichos, antojos, apetencias, y cualquier otra cosa que sea imposible confesar. Para que aquella fiesta acabe en un libro de funambulescos invitados que aquí están, hace falta más que un milagro: una cadena de eslabones maravillosos, que llamaremos, para no discutir, poemas. 

Dante Medina, José Brú, Francisco Peralto
Guadalajara, México – Málaga, España

Francisco Aliseda, Carmen Peralto, José Brú, Francisco Peralto, Dante Medina, Antonio Orihuela, Rafael Peralto y Manuel Calvarro en Edita 2010 para la presentación de Ojos que sí ven, antología de poesía experimental
En Punta Umbría, para la presentación en Edita 2010. De izquierda a derecha: Paco Aliseda, Carmen Peralto, José Brú, Francisco Peralto, Dante Medina, Antonio Orihuela, Rafael Peralto y Manuel Calvarro.

Título: Ojos que sí ven. Antología de poesía experimental de México y España.
Autores: José Brú, Dante Medina, Francisco Peralto.
Editorial: Corona del Sur.
ISBN: 978-84-92947-66-9.
Precio: 30 €.