Cuando empezamos a practicar yoga y si sentimos que va a ser una práctica duradera, lo más útil, lógico y, por qué no decirlo, higiénico, es comprarnos nuestra propia esterilla.
Una vez que la tenemos, y comenzamos a usarla, como hábito, deberíamos lavarla con periodicidad (normalmente cada fabricante da una serie de instrucciones de lavado en particular), habitualmente se deben lavar a mano, en una bañera, balde o similar y con jabón neutro o, mejor aún, sin usar ningún tipo de jabón.
Para secarlas, nunca debemos dejarlas expuestas al sol.
Pero... entre lavado y lavado, una manera de mantener perfectamente higiénica y limpia la esterilla es usar en ella una mezcla que podemos hacer nosotros mismos.
Este spray contiene en distintas proporciones agua destilada, agua de hamamelis o vinagre blanco, aceite esencial del árbol del té y unas gotas de nuestra esencia favorita.
El aceite esencial de árbol del té tiene muchísimas propiedades, entre ellas, es un gran antimicrobiano. Pese a su nombre, no tiene nada que ver con la popular planta del té, sino que se extrae de la destilación de las hojas de Malaleuca alternifolia, un arbusto o pequeño árbol originario de Australia y al que se le atribuyen numerosas propiedades beneficiosas para nuestra salud: es antiséptico, antibiótico y antifúngico. También es un potente cicatrizante, antiinflamatorio, desinfectante e incluso desodorante. Por lo tanto, es ideal para usarlo en nuestra esterilla.
Necesitaremos:
- 3 partes de agua destilada.
- 1 parte de agua de hamamelis o de vinagre blanco.
- 10 gotas de aceite esencial del árbol del té.
- 10-20 gotas de la esencia elegida: eucalipto, lavanda, nerolí...
Combínalo en un bote de cristal o plástico y agítalo bien antes de cada uso. Úsalo después de tu práctica diaria , justo antes de enrollar tu esterilla de yoga.