En noviembre de 2010, mi padre nos lanzó e invitó a mi hermano y a mí, a un viaje a Roma. Sería una estancia relámpago de escasos días, dedicados muy en exclusiva a patear todo lo posible de la ciudad y a fotografiar lo posible y lo imposible. Seríamos sus ojos y su inspiración allí, y a la vuelta, surgieron distintos trabajos visuales, algunos de los cuales publiqué en cuadernos individuales.
Estos de hoy pertenecen a "ROMAnizada", publicado en 2010, poco después de volver.
Allí donde señala está Roma
La Roma de los círculos perfectos
La Roma de todos los caminos
La Roma gloriosa en sus ruinas
Disfrutad y arrivederci!